Tras una tragedia familiar, el joven Toby Burns (Miller) es inscrito a regañadientes en una terapida en la que debe pasar tres días y tres noches en una remota isla desierta. Toby pronto descubre que la isla "deshabitada" no está tan desierta cuando conoce a una misteriosa chica llamada Madeleine (Froseth). Y descubre que en ese lugar ninguno de los dos está seguro: alguien o algo acecha en la jungla, sediento de sangre, y juntos deberán encontrar una manera de salir de la isla antes de que se conviertan en su presa.